Hay niños, que después se transforman en adultos que nunca le vemos, que pasan en nuestras vidas como alguién ausente, alguién sin importancia. Son aquellos alumnos de clase que no son lumbreras, no despuntan, ni tampoco son aquellos gamberros, los que caen bién a las chicas. Son aquello que tienen miedo de responder en clase y cuando lo hacen dicen algo tonto, absurdo, mal visto, sendo motivos de bromas de otros más perversos...Son tímidos, olvidados por los profesores, por los padres, por si mismos. Los ingleses llaman de losers, los franceses de cranques...Otro día hace unos 4-5 años, de camino a Santiago, en las vacaciones, me encontré con uno en la gasolinera que está entre Sao Pedro y Jaguari. Me reconoció antes y me transmitió mucha alegría en verme. Me recordaba de él en los campeonatos que hacíamos en el barrio. Era un chico tímido, sin grandes conversaciones, sin grandes ambiciones, pero era un buón amigo. Me preguntó como estaba y le dije con verguenza de la situación que estaba en Barcelona, que había hecho medicina ( me dolió decir eso véndolo) y que bién. Él me miro con alegría y realemente con cariño de un amigo, y me dijo ' yo sabía que estaría así, tu lo merecía'...seguimos el viaje, seguimos nuestras vidas, pero a ese chico, que no tuvo grandes oportunidades, que seguro que los profesores sólo notoban su presencia, penso en lo dificil que es la vida para miles de personas que no tienen grandes talentos, ni que podrán cambiar el curso de sus vidas. Penso que a ese chico, con gran corazón, que el país necesita mejorar, necesita que esas personas que merecen ser felizes por ser buenas, honestas y íntegras...espero que Lula o quién sea pense en esas personas....
No hay comentarios:
Publicar un comentario